Alcalá de Guadaíra se ha
reencontrado este pasado lunes con una de sus tradiciones más ancestrales con
la recuperación de la procesión de la Virgen del Águila tras dos tres largos
años sin poder disfrutar de la patrona en la calle, cuando la Virgen baja desde
su Santuario en el Castillo por la Cuesta de Santa María hasta el centro de la
localidad.
Precisamente el recorrido este
año era una de las novedades debido a las obras que están siendo acometidas en
la céntrica calle de Nuestra Señora del Águila, por lo que este año la virgen
no transitaba por la calle herreros y el ayuntamiento, sino que seguía por la
calle Alcalá y Ortí hasta llegar a Santa Clara y retomar el clásico itinerario
hasta la Plaza Cervantes y su correspondiente regreso al templo desde ahí.
Pero la jornada empezaba por la
mañana a primera hora con la celebración de la Función Principal, contando con
la presencia de la alcaldesa y de la Corporación Municipal, mientras que por la
tarde tendría lugar la procesión a partir de las ocho y media, y que
tradicionalmente se hace coincidir la salida de la Virgen por la ojiva del templo
con los últimos rayos de sol.
Este año el capataz de la patrona
era Jaime Otero al frete de su cuadrilla de costaleros, ya que el turno ara
comandar a la patrona recaía en la de la Hermandad del Soberano Poder del
Miércoles Santo alcalareño, abriendo la comitiva la Agrupación Musical Cristo
de la Bondad de la Hermandad de la Borriquita de Alcalá. En la misma se
incluyan las representaciones de las hermandades y entidades religiosas de la
ciudad panadera, las monjas del convento del Santuario, el Consejo de
Hermandades, el pregonero y representantes de la corporación municipal, estando
el paso del Virgen acompañado musicalmente por la música de la Asociación
Musical Nuestra Señora del Águila.
Joaquin Galán.