Efímera ilusión, media hora en las calle de Sevilla por Torreblanca, Vía Crucis de La Fe 2.013

No pudo ser, pero La hermandad de Torreblanca, que estaba ubicada en la Iglesia de Santa Marina, hecho el paso de misterio a la calle San Luis, tan solo se asomo a la puerta para que los fieles, hermanos y vecinos de Torreblanca pudieran contemplar el misterio en la calles de la capital.

Lo cierto es que aún se sigue sin conocer quién dio autorización para esta salida a la calle la San Luis, y tanto El Consejo de Cofradías y la Autoridad Eclesiástica seguían sin decir claramente que sucedió y no queriendo entrar en esta cuestión, hecho que por otra parte ha agravado las relaciones entre ambas entidades y que pone de manifiesto los problemas que ha tenido desde un primer momento la organización del Magno Viacrucis del Año de la Fe.

Cierto es que en San Lorenzo el Sábado por la tarde se oía lo de "no hay intención de echarse a la calle" y esto a 24 horas vista del evento y si una fallaba, las demás no podrían salir tampoco, ojo no le hecho culpas al Gran Poder, ni mucho menos, otra cosa es que mi opinión sea que al ser este un evento conjunto y un "primer Vía Crucis Magno" la decisión de salir o no debía de ser por votación, y la hermandad que fuese al evento debería de acatar la mayoría, esto es mi opinión.

Entonces ¿porque elegir hermandades proclives a no echarse a la calle a la mas mínima posibilidad de lluvia? no es ser mal pensados, porque es evidente que había que contar con Gran Poder y Pasión dos de las mayores devociones en Sevilla, lo que ocurre que al final la composición del Vía Crucis en si no era la más acertada en cuanto a iconografías y el hecho de dejar fueras a La Macarena y La Esperanza de Triana es sorprendente. ¿Debía Torreblanca ir a la Catedral en Solitario, habiendo un plan A y B que no lo permitía, y que ni si quiera permitía mover un zanco? ¿Quien autoriza este saludo a los fieles en la Calle San Luis? ¿Y lo de Monte-Sión y Las Siete Palabras queriendo salir a la calle?

Desde el consejo se le quita importancia al hecho en sí del "saludo" a los fieles admitiendo que El Consejo no se siente "nadie" para desautorizar una salida, y Manuel Soria Campos por parte de palacio dice que se entero tarde de la salida de Torreblanca y por una foto, pero que sin embargo, se extraña sobremanera que un sacerdote estuviera en la delantera del paso oficiando los rezos en la calle, como alli sucedió.

Al conjugar unos y otros hechos la verdad que todo parece un despropósito, además era sabido que si había riesgo alto de lluvia el ayuntamiento no quería tal divulgación ya que esto sería perjudicial para el turismo, la no salida del Vía Crucis debido a la inestabilidad era un secreto a voces que nadie quería confirmar, y es cierto que el tiempo peude cambiar en pocas horas de hecho así fue pues la certera lluvia no fue tal, pues lo que acabo cayendo en la ciudad no fue perceptible en absoluto y en realidad podría haberse salido, lo que ocurre que con el parte que se manejaba el riesgo estaba servido, y no olvidemos que las hermandades son soberanas en su decisiones y son muy respetables y hay que acatarlo sin más.

Lo que sí parece que todo esto ha sido un caldo de cultivo muy espeso y complejo y que ha derivado en lo que hemos vivido este pasado fin de semana, con decisiones variopintas y hasta difíciles de entender. Aun así es de comprensivo el Saludo de la Hermandad de Torreblanca a su barrio por primera vez en las calles de Sevilla, al final se rezo y se sintió, y se lloro en San Luis ¿porque criticarlo? Una versión rancia de la ciudad no lo entiende la otra más permisiva entiende el sentir del barrio y la gran pena y se solidariza con ellos por lo que les suponía, no todo el mundo tiene la suerte de estar ubicado en el casco antiguo, al final todo se reduce a una "dualidad" como suele ser el caso en esta ciudad tan polarizada.

Joaquín Galán.

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